viernes, 13 de noviembre de 2009

Ecología Humana


Además de la destrucción irracional del ambiente natural, hay que recordar una mas grave aún: la destrucción del ambiente humano, ya que nos esforzamos muy poco por salvaguardar las condiciones morales de una autentica ecología humana.
“La ciudad pos industrial constituye el paso de una cultura rural a una cultura urbana. En ella se altera la forma con la cual un grupo social, los hombres cultivan su relación consigo mismos, con los otros, con la naturaleza y con Dios” (Santo Domingo, Conclusiones, Nº 255). “Es asimismo preocupante, junto con el problema del consumismo y estrictamente vinculado con el, la cuestión ecológica. El hombre, impulsado por el deseo de tener y gozar, mas que de ser y de crecer, consume de manera excesiva y desordenada los recursos de la tierra y su misma vida”.
Constantemente en los medios de comunicación transmiten opiniones alarmistas sobre los peligros que acarrearía a la humanidad el crecimiento de la población mundial. Describiéndolo como “explosión demográfica”.
Uno de los mayores problemas de la humanidad para el presente siglo es la superpoblación. Esta superpoblación, ávida de energía, está consumiendo el planeta de forma insostenible.
Pero, ¿Cómo se ha llegado a este estado de cosas? Responde Juan Pablo II que “en la raíz de esta insensata destrucción del ambiente natural hay un error antropológico. El hombre, que descubre su capacidad de crear, en cierto sentido, el mundo, olvida que este se desarrolla siempre sobre la base de la primera y originaria donación de Dios”. Y afirma que “el ingenio del hombre parece orientarse, en este campo, a limitar, suprimir o anular las fuentes de vida, recurriendo incluso al aborto”.

No hay comentarios: